Limpiar la alfombra es el primer paso utilizado para eliminar las polillas.
Se usa un repelente de polillas en el último ciclo de lavado.
Si hay huevos y larvas serán removidas efectivamente hasta la próxima limpieza de la alfombra, evitando una nueva contaminación.
Además de limpiarlas también reparamos y restauramos cualquier daño que fuese causado por las polillas en la alfombra.